Estamos en tiempo de Cuaresma.
Para mi es el tiempo de reflexión del año.
La introspección.
A muchos nos da cierto temor mirar más adentro o echar una telón a nuestros sentimientos y pensamientos.
Miles de personas, se mueven en el mundo, estos días, preparando un recuerdo, un memorial.
Cada uno tenemos el nuestro, seamos creyentes o no.
Yo lo soy, yo necesito creer, tal vez ya no en un Dios pero si en las personas.
Somos hechos a imagen y semejanza, los unos con los otros.
Si la Navidad es el tiempo del amor, este es el tiempo de ayudarnos, de la fraternidad.
Y más con lo que sufren miles y miles de personas, nosotros podemos tener también.
Seamos compasivos, comprensivos y aunque no podamos tender una mano, tendamos hilos de humanidad.
Para mi es el tiempo de reflexión del año.
La introspección.
A muchos nos da cierto temor mirar más adentro o echar una telón a nuestros sentimientos y pensamientos.
Miles de personas, se mueven en el mundo, estos días, preparando un recuerdo, un memorial.
Cada uno tenemos el nuestro, seamos creyentes o no.
Yo lo soy, yo necesito creer, tal vez ya no en un Dios pero si en las personas.
Somos hechos a imagen y semejanza, los unos con los otros.
Si la Navidad es el tiempo del amor, este es el tiempo de ayudarnos, de la fraternidad.
Y más con lo que sufren miles y miles de personas, nosotros podemos tener también.
Seamos compasivos, comprensivos y aunque no podamos tender una mano, tendamos hilos de humanidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario