Páginas

lunes, 3 de octubre de 2016

Buenas noches, amante mío.

El sueño de una noche, es sentir tu piel desnuda bajo mis dedos.
Esa tensión que te hace vibrar rayando la madrugada.
El ritmo acompasado de tu estremecimientos, de tu mano acariciando la fuente de tu climax.
Ese brillo de ojos lascivo mirandome sin pudor ni mentiras.
Un fulgor interno que quema lo externo del sexo encendido.
Me gustas tanto que muero por saborear lo prohibido.
Esa fruta dulce y jugosa que me ofreces entre gozos de silencios y jadeos.
Y tú esencia llena, como mar embravecido, salpicandome de pasión y olvido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario